FANTOMAS:

Se trata de un elemento que copia y simula las estructuras anatómicas y movimientos de la cabeza y la boca de un paciente. Pueden ser totales, (solo una cabeza o un cuerpo entero como un muñeco a tamaño real) o parciales (sólo los maxilares). Se utiliza para practicar y aprender los procedimientos, técnicas y posturas que se llevarán a cabo en los tratamientos reales.  

FERMIT®:

Es una marca comercial muy conocida y empleada en clínica dental. Se trata de un material de restauración provisional fotopolimerizable.

Se emplea como producto provisional de base para puentes, coronas y preparaciones inlay/onlay. Posee cualidades elásticas y se elimina con facilidad sin dañar la superficie donde se asentó.

FÉRULA DE BLANQUEAMIENTO:

Es una férula personalizada para cada paciente y se elabora con el fin de contener el producto blanqueante y mantenerlo en contacto directo con los dientes. Se puede fabricar en clínica fácilmente con la ayuda de un aparato de vacío para elaborar férulas y con las planchas plásticas del grosor adecuado.

FÉRULA DE DESCARGA:

Es un aparato elaborado normalmente en el laboratorio protésico, confeccionado a medida para cada paciente y que sirve para tratar y paliar los efectos del bruxismo.

Ayuda a corregir las posiciones mandibulares incorrectas, aportando un efecto reeducativo, liberando y reduciendo las sobrecargas musculares y las dolencias que se producen durante el rechinado. Además evita la abrasión y desgaste de los dientes, ya que la placa o férula se desgasta con más facilidad que el esmalte y proporciona una superficie protectora.

Debe utilizarse a diario para obtener buenos resultados y para que ésta no se desajuste. Ha de ser revisada en clínica cada cierto tiempo para asegurar que su integridad esté bien conservada y haga el efecto deseado.

Las férulas de descarga pueden ser rígidas o semirrígidas. Las primeras son más duraderas y pueden contener algún elemento metálico como un gancho de bola para aumentar la retención si fuera necesario. Las semirrígidas son más blandas y por lo tanto su desgaste en el tiempo es mayor.

Sin embargo son una buena opción para aquellas personas que no toleran contener aparatos extraños en boca, ya que son más delgadas y cómodas. Por ende, son más económicas.

FERULIZACIÓN DENTAL:

Es un método empleado para dar sustento a uno o varios dientes debilitados y que presentan cierto grado de movilidad. Se realiza uniéndolos en su parte lingual o palatina con un arco de alambre y resina. Es importante al mismo tiempo que se feruliza, detectar si la debilidad vino por causa de una enfermedad periodontal y tratarla de raíz para que las estructuras que soportan los dientes no continúen dañándose.

FLUORURO DE USO DENTAL:

Se trata de un compuesto químico que añadido a las pastas dentífricas, colutorios, geles y barnices proporciona un aporte de flúor adecuado para la prevención de la caries dental.

Los más empleados en clínica para el tratamiento de fluorización son:

–         Fluoruro sódico (Na F).

–         Fluoruro estannoso (Sn F2), que ya apenas se utiliza).

–         Fluoruro de fosfato acidulado (Na F+H₃PO₄+HF).

Existe peligro de intoxicación si se ingiere una dosis superior a 250 mg de fluoruro (provocando vómito, dolor abdominal, diarrea, etc. y puede inducir la muerte con dosis de entre 250 mg y 500 mg. Por lo tanto es de vital importancia no dejar a niños pequeños a solas con estos productos ya que podrían ingerirlo.

Hoy día se ha popularizado el uso de geles tixotrópicos, que al ser aplicados se calientan con la temperatura intraoral y con la presión de la mordida se fluidifica penetrando fácilmente en todos los espacios de los dientes. Se aplican colocando un poco de producto en una cubeta desechable y dándosela a morder al paciente.

FÓRCEPS:

 Se trata de un instrumento de acero inoxidable con forma de tenaza que se emplea para practicar exodoncias (extracciones dentales). Según sea su parte activa, recibe un nombre y se aplica a una pieza dental determinada.

Encontramos:

–         Fórceps para el maxilar superior. Su mango y cabeza forman una línea recta.

–         Fórceps para el maxilar inferior. Su mango y cabeza forman un ángulo de 90°.

–         Fórceps para adultos. Son de gran tamaño.

–         Fórceps para niños. Son más pequeños que los anteriores.

FRESAS PARA CONTRAÁNGULO:

Son pequeños instrumentos que poseen un mandril (que se adapta al contraángulo) y una punta activa. Están hechas de carburo de tungsteno, antiguamente eran de acero.  Provocan el corte mediante la acción de unas cuchillas minúsculas que se hallan en la punta activa de la fresa.

Las más usadas en clínica son: fresa de batt, fresa de Gate o llama, fresa de milhojas, fresa de cono invertido, fresa tipo 8,30. También encontramos las fresas de pulido: tazas o copas de pulido, cepillos de pulido y discos de pulido.

FRESAS PARA TURBINA:

Muy similares a las anteriores, pero el extremo útil es de diamante. Producen el corte mediante abrasión de los gránulos que posee la punta activa. Las hay de distinto tamaño de grano: grano grueso, medio, fino, muy fino y ultra fino.

Según la forma de la punta pueden ser: de lanza, cónicas, con forma de pera, etc. Las más conocidas son: la fresa 8,30, la fresa cónica de punta fina, la fresa de oliva o pera y la fresa de fisura.